Los farmacéuticos defienden que el sistema se adapta mejor al nuevo perfil del profesional y se desliga así de las bajadas de precios decididas por el Gobierno o por el propio mercado.
Desde el pasado mes de abril, los farmacias belgas tienen un nuevo modelo de remuneración. El margen antiguo del 31 por ciento del precio de los medicamentos con receta dispensados ha desaparecido en favor de una tasa de 3,88 euros por envase, que se completará con un pequeño margen que representará el 20 por ciento de la remuneración de cada farmacia.
Además, se pagará 1,2 euros por cada receta dispensada por principio activo y por cada receta que tenga en cuenta la eficacia terapéutica (según lo pautado por el Gobierno en el capítulo cuatro de la norma). Estos dos requisitos exigen al farmacéutico un trabajo particular de análisis y de seguimiento a la dispensación que ahora se pagará. De hecho, lo más novedoso es la cuota anual de 500 euros por farmacia por obtener información detallada del paciente en la primera dispensación de un tratamiento crónico.
La ministra de Sanidad belga, Laurette Onkelinx, pone en marcha así una profunda reforma de la profesión farmacéutica, que prentende dar respuesta a la petición de estos profesionales, que venían pidiendo que los reembolsos fueran acordes con las nuevas tareas y desarrollo profesional de los farmacéuticos, aunque también espera que genere ahorros en la factura sanitaria de 2010. Anne Lecroart, farmacéutica en Bruselas y secretaria general de la Asociación Belga de Farmacéuticos, sostiene que el nuevo modelo tiene "dos grandes ventajas". Por un lado, se paga el acto de la dispensación, pero también el asesoramiento y seguimiento de pacientes desde la farmacia. Y, por otro, se produce una "desconexión" entre el servicio farmacéutico y los recortes de precios decididos por el Gobierno o relacionados con la evolución del mercado.
El nuevo modelo sólo se aplicará a los medicamentos reembolsados en farmacias, no en hospitales. No habrá ningún cambio para los no reembolsados ni para la venta libre. Bélgica se suma a Alemania, Holanda o Suiza, que en los últimos años también han reformado sus modelos para adaptarse mejor a los nuevos cometidos de los farmacéutico, y para ser menos dependientes evolución de los precios.
Bélgica, con un modelo liberalizado, tiene 5.131 farmacias que se caracterizan por su pequeño tamaño, con un ratio de 2.070 habitantes y un ingreso de casi un millón de euros, del que el 84 por ciento son recetas y el resto alimentación, cosméticos e higiene.
R. García del Río | rosario.garcia@correofarmaceutico.com - Lunes, 3 de Mayo de 2010
Este blog nace con la esperanza de que llegue a ser un nexo de unión entre los grandes olvidados y auténticos garantes del actual sistema farmacéutico: los farmacéuticos rurales. En él, se colgarán noticias relacionadas con el mundo de la farmacia rural, y me agradaría que os animárais a compartir ideas. Vuestra opinión es muy importante.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario