Nunca pensé que estudiar francés en el colegio y el instituto (cosas de la edad) fuera a servirme de algo en la vida. Realmente aún no sé si servirá de algo, máxime cuando mi estancia en Inglaterra contribuyó a crear un revoltijo de idiomas en mi cabeza que sirvió para olvidar el poco francés que sabía al mezclarse con el poco inglés que aprendí, algo así como intentar mezclar el agua con el aceite, se aprecia rápidamente que no se llevan bien.
A lo que iba, el poco francés que aún conservo me sirve para poder leer algo sobre el movimiento de la farmacia mediterránea en la vecina Francia, algo en marcha y con líneas bastante definidas que amenaza con expulsarnos de la denominación de origen Modelo Mediterráneo de Farmacia, dada la poca evolución del que está en vigor en España.
Desde los Pirineos y más allá que diría buzz lightyear, aunque en este caso no hay que andar tanto, se está llevando a cabo una movida que bien nos vendría bien nos "salpicara" un poco a todos los que aquí trabajamos.
Fue la cocina francesa la que lideró una tendencia y marcó toda una época en los fogones del resto del mundo hasta la irrupción de Ferran Adrià y sus predecesores que han convertido a la cocina española en la más innovadora a nivel mundial. Así se produjo el cambio a una cocina más elaborada que compitiera no en precio sino en lo que se acuñó posteriormente con la denominación gourmet.
La farmacia necesita innovación y adaptación a los tiempos, competir con los posibles competidores ó precisamente para no tenerlos, un cambio de concepción en las pautas de trabajo que costará tiempo y que en Francia ya se está haciendo, a falta de nuestro Adrià, que ni ha llegado ni se le espera, tendremos que mirarnos en el espejo de los que si están evolucionando este rancio mundo de la farmacia.
Aquí asusta sólo oir determinadas palabras que no citaré para que nadie se escandalice, y allí se habla sin tapujos de cambios de márgenes y de proponer la participación de la farmacia rural en proyectos de telemedicina como "... el lugar apropiado para llevar a cabo la teleconsulta médica cuando la oferta es escasa en todo".
Todas estas propuestas se ubican en un plan que va más allá de la mejora de la economía de la farmacia en general ya que la ministra quiere dar un apoyo especial a las farmacias rurales "... cuya dirección es esencial para la salud de nuestros ciudadanos y el dinamismo de nuestros territorios ". La ministra también anunció su intención de solicitar la inclusión de este tema en el orden del día del Comité de Planificación de la próxima interministerial.
Así lo dijo la ministra de Salud del país galo Roselyne Bachelot en el salón Pharmagora, y así lo cuenta una vez más Le Quotidien du Pharmacien, aunque para leerlo hay que registrarse primero y tener ciertos conocimientos de francés, unos conocimientos que pensaba nunca me servirían para nada...
Frente a las medidas coyunturales y generalistas aplicadas en España y que no tienen en cuenta los argumentos expresados en el anterior párrafo, la homóloga de nuestra Trinidad Jiménez, anunció la creación de un grupo de trabajo para "conseguir un poco de luz sobre la evolución de los márgenes de las farmacias". Para ella, "...es imprescindible adaptar el modelo de negocio del medicamento en un mercado farmacéutico estructuralmente menos dinámico que antes.
La ministra no tiene intención de dejar que este tema se demore y para ello, las conclusiones del grupo de trabajo se pondrán en práctica en la próxima factura de la financiación de la Seguridad Social (PLFSS) para el 2011.
Todas estas medidas están enmarcadas en el desarrollo de la ley HPST cuyos decretos se firmarán el próximo 21 de Julio de 2010 y que buscan el cambio de metodología de trabajo de toda la profesión hacia un modelo en el que primen los actos de prevención, cribado y seguimiento de pacientes crónicos.
En resumen, a falta de indagar cómo se ha llegado a desarrollar todo el proceso, lo que aquí se aprecia es la mano del Estado en la tutela sobre la prestación del servicio farmacéutico, algo que se ha tratado durante bastante tiempo con los distintos agentes sectoriales y muy diferente al compadreo que hemos vivido hace poco en este país y que no refleja una idea clara de lo que se quiere que sea una Farmacia...
Maldito parné que decía la canción, para que c..... estudiaría yo francés.
Desde el pueblo más pequeño de la provincia de Sevilla.....
Un fuerte abrazo a tod@s,
Javier
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